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"Hace algún tiempo que he dejado de sentir cosas, ya no siento nada. Da igual dónde esté, con quién esté, si salgo o no, si viajo o no. Lo que antes me hacía disfrutar... Ahora nada me provoca nada"
Uno de los síntomas que más deben hacernos poner la atención en que algo no va bien es precisamente este. No sentir nada.
Sobretodo cuando además se acompaña de otros síntomas como sentir cansancio constante a nivel físico, dificultad para pensar y problemas de concentración y necesidad de hacer mucho sobre esfuerzo para moverse o incluso salir a la calle.
¿Por qué pasa que alguien pueda decir «no siento nada»?
Ese «bloqueo emocional» es por lo general una consecuencia, aunque también causa, de una pérdida de ilusión o cosas positivas que a veces implica muchas pequeñas pérdidas y a veces únicamente hace falta una pérdida suficientemente importante.
Puede haber empezado en un proceso de duelo, por ejemplo, o en una ruptura.
También puede ser que sea porque de un tiempo a esta parte por alguna circunstancia externa esa persona ha ido dejando de hacer actividades agradables.
¿Qué se puede hacer para volver a ser quien era?
Lo mejor es buscar ayuda profesional. Muchas veces este paso es muy difícil y se retrasa un tiempo hasta que la persona se siente preparada.
La sociedad cada vez responde más a lo importante que es recibir ayuda profesional cuando uno se encuentra mal anímicamente y no únicamente cuando el dolor es físico.
Artículo escrito por Begoña Albalat