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Lo que piensan los demás nos importa
Como decía Quino a través de Mafalda:
Cierto, no estamos solxs, y como no estamos solxs:
- Queremos ser aceptadxs, que nos quieran.
- Queremos que cuenten con nosotrxs, que nos hablen, que nos escuchen, que nos llamen para salir, que nos pidan opinión, queremos sentirnos parte de algo. Pertenecer a “todxs”.
- Queremos que hablen bien de nosotrxs, no fallar a nuestro grupo, parecernos, porque hasta en la diversidad hay uniformidad, y que nos acojan y arropen.
No queremos sentirnos solxs
Creemos que para conseguir todo eso tenemos que «posturear» para que no se vea lo feo, lo imperfecto, de lo que me avergüenzo o lo que no se me da bien. Que me debo tragar mis preocupaciones y no molestar con mis problemas a nadie porque eso puede condicionar lo que piensan lxs demás sobre mi. Que nunca debo mostrarme débil…
No pasa nada. A todxs nos pasa lo mismo.
Es imposible, hagamos lo que hagamos, querer a todo el mundo y que todo el mundo nos quiera. Da valor e intenta conservar lo que tienes. Llama tú si no te llaman, pide lo que necesites, cuenta tus cosas, di “te quiero” o “me gusta estar contigo” más a menudo con palabras, no sólo con likes.
Es imposible hacer las cosas siempre bien porque eso depende de miles de factores. Hazlas a tu manera y pide opinión o consejo si no sabes qué hacer o cómo hacerlo y agradece al otro su implicación .
No finjas que no te pasa nada cuando sí te pasa, por miedo al qué dirán, a defraudar, o a parecer débil. Eso te aleja de todos. A lxs demás les pasa lo mismo que a nosotrxs y quieren que los tengamos en cuenta y que les pidamos consejo o escucha. Hazlo.
Si la lías parda , si metes la pata, no disimules da la cara y rectifica. El fallo está ahí, sin él no se llegaría nunca al éxito. Bueno sí, sólo por casualidad. Tu fracaso conseguirá futuros éxitos en ti o en otrxs. Además no lo podemos eliminar aunque nos empeñemos con todas nuestras fuerzas. Reconócelo y acéptalo.
No te tambalees si te critican, a nadie nos gusta que nos critiquen. No nos gusta porque eso significa reconocer que podemos fallar y que por lo visto lo hemos hecho y lo peor de todo, se han dado cuenta. Parece que sólo es válido el éxito y si fracaso estoy fuera. Mentira. Cuando te critiquen pregunta que es exactamente lo que tú haces que no ha estado bien, y si criticas tú, haz lo mismo, sé muy concretx y habla sobre comportamientos, no descalifiques ni juzgues.
No te sientas falsx o mentirosx por mostrarte distintx según con la gente que estés o la situación en la que te encuentres. Nadie se comporta igual por ejemplo de celebración familiar, que de cervezas con sus amigxs o trabajando. También cuando estamos solxs o acompañadxs nuestras reacciones ante las cosas son distintas, reaccionamos más como se espera que lo hagamos si estamos en compañía. Eso no es ser falsx.
Si te gusta algo de alguien o algo que hace alguien o admiras realmente a alguien y tienes la oportunidad de decírselo, hazlo. Dilo, no te cortes. Lo que sea: que te haya cogido sitio en el gym, que te cuente «x» cosa, su corte de pelo nuevo. Utiliza frases como: «Gracias, eres genial», «Lo has hecho súper bien», «orgullo de hermana» , «tío, hoy estas estás guapísimo»… A todxs nos gusta que nos digan algo bueno sobre nuestras cosas o nosotrxs porque eso significa que voy bien, que gusto a lxs demás, que estoy dentro.
No te consideres frívolx si das importancia a tu aspecto para gustar a otrxs. Intentar agradar y ajustar tu vestuario a la ocasión o ponerte algo que te han regalado, aunque no sea de tu estilo, para que la otra persona se alegre, es hacer una concesión a los demás. Sólo ten cuidado de si lo haces demasiado o si eres poco fiel a ti mismx.
Todo eso nos une.
La mirada del otro importa,su visión nos posiciona pero no nos determina.
Artículo escrito por Begoña Peraita
